domingo, 9 de octubre de 2016

Una crónica de la vida del Gran Maestro Yip Man (1° parte)

Dentro de los círculos del Ving Tsun, un nombre es mencionado con gran respeto: el del Maestro Yip Man.

El Maestro Yip Man nació en Octubre de 1893 y murió en Diciembre de 1972 a la edad de 79 años. Toda su vida fue abocada a la causa del Ving Tsun Kung Fu. Él es el responsable de llevar el Ving Tsun Kung Fu a la posición que tiene en la actualidad, moviéndolo de ser un oscuro sistema de combate conocido solamente dentro de China, a un estilo de kung fu conocido en todo el mundo y practicado por miles de personas.
Yip Man fue el primer Sifu en abrir una escuela accesible al público en general. En todo el mundo, estudiantes de Ving Tsun Kung Fu continúan publicando artículos sobre su vida y logros. 
Yip Man nació el 14 de Octubre de 1893 (5 de septiembre en el calendario chino) en Foshan, al final de la dinastía Ching, en una acaudalada familia de comerciantes; su nombre real era Kay Man, y era el segundo hijo de la familia, viviendo en la avenida Fook Yin (Avenida de la Felicidad y Erudición) en la zona de los Jardines Mora de Foshan.  Las tierras de la familia Yip ocupaban una gran área, con dos filas de grandes casas viejas (al menos veinte) alineadas a lo largo de la avenida, en el lugar exacto en que ahora se encuentra la casa de gobierno municipal. El templo de la familia Yip se encontraba en el centro de estas tierras.

Foshan se encuentra situada en la región más prospera del delta Zheyieng de la provincia de Guangdong y era el centro del transporte terrestre y marítimo. Desde tiempos antiguos, fue llamada una de las mayores ciudades históricas de China, junto con Jingde, Thuxian y Hankiou. La industria y el comercio, en particular el comercio de artesanías, prospero de manera notable y los residentes vivían una vida prospera y estable. Como resultado, el arte y la cultura se desarrollaron extensamente y como el arte marcial formaba parte de esto, era muy popular el aprendizaje de un arte marcial. Renombrados maestros de la escuela sureña (Wong Fei Hung, Cheung Hung Shing, Leung Tsan, Fung Siu Ching, etc) salieron de Foshan.

Durante el periodo entre la caída de la dinastía Ching y la fundación de la República Popular de China, un gran número de famosos artistas marciales fueron formados en la ciudad de Foshan. La causa de esto podría deberse al incendio del monasterio Siu Lam en la provincia de Fukien, que resulto en el gran escape de cientos de monjes y practicantes expertos en el estilo Siu Lam de kung fu, huyendo del asedio de los soldados del gobierno Manchú. Muchos de ellos, como el famoso Maestro Chi Shin, escaparon hacia el sur y se escondieron en Foshan.

Yip Man comenzó su entrenamiento bajo Chan Wah Shun, discípulo del maestro Leung Jan, y  el primero de los tres maestros de Ving Tsun en enseñarle. La biografía de Chan en los archivos lo ubican en Foshan trabajando como cambista – de allí su sobrenombre Jow Chien (Cambista) Wah – y enseñando kung fu, durante treinta y seis años.

Nacido de una familia respetable y acaudalada, dueña de tierras y casas a todo el largo de la calle, él podría haber pasado su vida como un joven noble llevando una vida protegida, sin permitir siquiera que sus manos se mojaran con las lluvias de primavera. Sin embargo, para sorpresa de todos, mostró un interés especial por las artes de combate. Como el cambista Wah debía rentar un lugar privado para enseñar a sus discípulos dado que no tenía una ubicación permanente para su gimnasio, el padre de Yip Man les permitió amablemente hacer uso del Templo Ancestral de la familia Yip. Sin embargo, el alto costo de las lecciones, que podían llegar hasta 3 monedas de plata por mes, resultó en un pequeño número de alumnos en el gimnasio. Según su madre, Madame Ng, Yip Man era un niño estudioso. Luego de sus lecciones rara vez perdía su tiempo jugando con sus amigos, sino que dedicaba todo su tiempo libre en escribir poemas y pintar; o siendo el hijo del dueño del local, observar a Chan Wah Shun enseñar a sus alumnos. Las visitas se fueron haciendo más regulares, hasta que con 9 años (algunos dicen 6 años) se acercó a Chan y le pidió ser aceptado como su alumno.
Chan Wah Shun estaba alrededor de los 60 años, y no quería aceptar más alumnos en esa época de su vida. A fin de desalentarlo, Wah dijo que lo admitiría como estudiante si pagaba la cuota de las lecciones de tres tael de plata. Al escuchar esto Man corrió a su casa lleno de placer y esperanza; y para sorpresa de Wah, al día siguiente volvió trayendo los tres tael de plata consigo. El Maestro Chan se encontraba sorprendido por lo que el niño había hecho, y pregunto a Man como había obtenido el dinero. Man respondió que sabía que la cuota de las lecciones eran de tres tael de plata, por lo que hacía unos años había comenzado ahorrar para esto. Chan no creyó esta razón, creyendo que debía haberlo robado a sus padres, por lo que no lo aceptó como discípulo, ni le devolvió el dinero, diciendo “Si quieres el dinero de vuelta, trae a tu madre para probar que el dinero realmente te pertenece”.  (Al haber nacido en una familia acaudalada, siendo su padre Yip Oi Doh un respetable e influyente mercader del condado de Namhoi, era posible que Man tuviera acceso a esa cantidad de dinero). Yip Man no pudo hacer otra cosa que ir en busca de su madre y llevarla a encontrarse con el Maestro. Al reunirse con la madre del niño, Chan Wah Shun le dijo “No tengo sospechas del origen del dinero; quería reunirme con su madre y hablar con ella personalmente, y preguntarle si realmente permite al niño aprender kung fu de mí. De hecho el niño tiene capacidades, y ha estado observándome enseñar kung fu desde hace mucho tiempo. Si aprende de mí seguramente será exitoso haciendo carrera como artista marcial”. Madame Ng estuvo encantada al escuchar esto, y dijo que si Chan Wah Shun accedía a aceptar a su hijo, ella no dudaría en permitirle estudiar las artes marciales.

Wah finalmente lo aceptó como discípulo, pero no le enseñaba con mucho entusiasmo, ya que veía a Yip Man muy delicado para las artes de combate. Sin embargo Man se esforzó mucho en aprender, usando su inteligencia y la ayuda de sus hermanos mayores en kung fu (Sihings), lo que finalmente supero el prejuicio de Wah hacia él. A partir de allí Wah comenzó a enseñarle seriamente el arte del kung fu. Durante sus treinta y seis años de enseñanza, Wah enseño a dieciséis discípulos, incluyendo a su hijo Chan Yu Min. Yip Man fue su último y más joven discípulo. En esa época estudiando junto con Yip Man estudiaban Lui Yui Chai, Ng Chung So, Ng Siu Lo. Las tierras donde entrenaban son ahora propiedad del gobierno y el salón ya no existe.
El Maestro Chan murió en 1905, pero antes de morir le pidió a Ng Chung So que ayudara a Yip Man (quien tenía doce años entonces) a completar el sistema Wing Chun. Man continuó su aprendizaje junto a su Sihing en la escuela de Ng Chun So, situada en la calle Sin Heung de Foshan, durante tres años más. El cuerpo de Chan Wah Shun fue llevado por sus discípulos a la aldea Chan en Shun Dak, para ser enterrado.

Cuando Yip Man tenía 16 años, con el patrocinio de su familiar, Pong Wai Ting, sus padres lo enviaron a Hong Kong a estudiar en el St. Stephen’s College, una escuela secundaria para familias adineradas y extranjeros que vivían en Hong Kong. Siendo un adolescente activo, hizo grupo con un grupo de jóvenes de la escuela, más o menos de su edad y aficionados a buscar pelea a sus compañeros europeos. Habiendo recibido enseñanzas en las artes de combate, Man frecuentemente derrotaba a sus oponentes europeos en las peleas, aun siendo de menor tamaño. Él admitiría en sus recuerdos tiempo después que en esa época se encontraba demasiado orgulloso de sí mismo.

Un día, un compañero de Man, apellidado Lai, le dijo “En nuestra compañía hay un practicante de kung fu, amigo de mi padre, de 50 años. ¿te atreves a combatir con él?” Yip Man, siendo un joven arrogante que no había experimentado el fracaso, no temía a nadie, por lo que prometió enfrentarse contra este “anciano”. El día acordado, Yip Man, llevado por su compañero, fue a encontrase con el “anciano” en una compañía de seda en la calle Jervois en Hong Kong. Luego de saludarlo Man le explico sus intenciones. El hombre, presentado a Man como el Sr. Leung, respondió con una sonrisa, “Así que eres discípulo del maestro Chan Wah Shun de Foshan. Eres joven. ¿Qué aprendiste de tu Sifu? ¿Ya aprendiste Chum Kiu?” Yip Man estaba tan ansioso de combatir que dio una respuesta irrelevante, mientras se quitaba su ropa larga, preparándose para el combate.
En ese momento el “anciano” le dijo, sonriendo, que podía atacar cualquier parte de su cuerpo de cualquier forma que quisiera, que él por su parte solo se defendería y no realizaría ningún contra-ataque, ni lo lastimaría de ninguna forma. Esto solo aumento la furia de Man. Sin embargo, Yip Man encaró el combate con cuidado y calma. Lanzó fuertes ataques al hombre, que los bloqueo fácilmente y lanzó a Man al suelo, no una, sino varias veces. Cada vez que Man terminaba en el suelo se paraba y volvía a atacar, solo para encontrarse nuevamente en el suelo. Finalmente debió darse por vencido. Luego del combate supo que el “anciano” era su sibak Leung Bik, el hijo mayor de Maestro Leung Jan de Foshan (maestro de Chan Wah Shun), y descendiente directo del linaje original del Ving Tsun llegando hasta la misma Yim Ving Tsun. A partir de ese momento Yip Man aprendió de Leung Bik por cuatro años, aprendiendo los secretos del Ving Tsun, expandiendo su base teórica y refinando su técnica.

Se dice que Leung Jan enseño el verdadero Ving Tsun a sus hijos, Leung Bik y Leung Chun, mientras que Chan Wah Shun aprendió una versión diferente (más dura) del estilo.
Chan Wah Shun era más grande y dependía más de la fuerza para ganar los combates; Leung Bik era un hombre más chico y no utilizaba los músculos. Yip Man pudo de esta forma aprender Ving Tsun duro y suave.

En 1914, Yip Man había planeado (con la ayuda de su hermano Yip Gai Gai) viajar para estudiar en Kobe (Japon), pero su plan falló.

A los 24 años, Yip Man vuelve a Foshan, habiendo desarrollado sus habilidades en Ving Tsun tremendamente mientras estuvo afuera. Sus antiguos compañeros creyendo que había aprendido otro arte marcial lo recibieron como un traidor al Ving Tsun; Yip Man se vio obligado a desafiarlos y los venció con sus nuevas habilidades.

Yip Man se quedó en Foshan donde encontró una posición como capitán de las patrullas de policía de Namhoi. Yip Man no tuvo una escuela formal de Ving Tsun, pero enseñó a varios subordinados, amigos y parientes. Entre estos estudiantes informales, se encontraban Chow Kwong Yue, Kwok Fu, Lun Kai, Chan Chi Sun y Lui Ying, que fueron los más conocidos. Chow Kwong Yue era conocido como el mejor estudiante del grupo, pero eventualmente se dedicó al comercio y dejo las artes marciales. Kwok Fu y Lun Kai continuaron, enseñando a sus estudiantes, y así el Ving Tsun del área de Foshan y Guangdong desciende principalmente de ellos en la línea de Yip Man. Chan Chi Sun murió joven, y Lui Ying se fue a Hong Kong; ninguno de ellos tomo estudiantes.

Durante los siguientes 20 años, Yip Man se casó con Wing Sing y tuvo cuatro hijos, sus hijos Yip Hok Chun (Yip Chun), Yip Hok Ching (Yip Ching) y sus hijas Yip Ar Sum y Yip Ar Woon. Cuando Yip no estaba trabajando, le gustaba juntarse con otros artistas marciales a practicar e intercambiar ideas de kung fu con sus compañeros de Ving Tsun en su casa. Yip instaló un muñeco de madera en la esquina de su sala de estar.

Lo Man Kam, su sobrino, recuerda una historia de esta época: “Durante los primeros años de la República China, Foshan tenía un festival anual llamado ‘Escenas de Otoño’. Un año Yip Man y su esposa fueron a ver el festival, y mientras estaban allí, un oficial del ejército trató de aprovecharse de la Sra. Yip. En ese momento, Yip usaba un traje largo con alpargatas. No era muy alto, y tenía una imagen de caballero más que de peleador. El oficial supuso que era débil e indefenso, por lo que se volvió más atrevido y ofensivo. Yip Man recurrió a la técnica de “Ataque y defensa simultanea” de Ving Tsun, y el oficial fue arrojado al suelo. Entonces, el oficial tomó su revólver, pero Man agarrando el barril y usando la fuerza de su pulgar rompió el gatillo, inutilizándolo.”


Ip Chun recuerda la historia de su padre derrotando a un peligroso ladrón:
“En la ciudad de mi padre había un ladrón buscado de nombre Tsu Ping, que era cruel, enorme, fuerte y hábil en artes marciales. La policía local lo buscaba desde hacía largo tiempo. Un día el escuadrón de mi padre fue informado que el ladrón buscado había aparecido en la ciudad de Foshan. Mi padre dirigió a un grupo de detectives en la búsqueda del ladrón; les informó que el ladrón era feroz y estaba armado, y que como era peligroso cruzar fuego con el ladrón en una calle concurrida, él se enfrentaría al ladrón y cuando estuviera controlado, ellos entrarían a detenerlo, pero hasta entonces debían esconderse.
Cuando el ladrón apareció, mi padre camino hacia él. Estando bien vestido y con una apariencia gentil, Man no levanto sospechas. El ladrón pasó por su lado, entonces mi padre se dio vuelta y lo llamó por su nombre. El ladrón entro en sospecha y comenzó a correr. Mi padre se adelantó y tomo al ladrón por el cuello de la ropa, mientras este trataba de sacar su pistola. Mi padre aferro el brazo del ladrón. El ladrón luchó por liberarse, pero los brazos de Yip Man eran demasiado fuertes, y su postura demasiado firme. En ese momento los detectives aparecieron corriendo, esposaron al ladrón y se lo llevaron a la oficina.
Cuando el ladrón fue interrogado, admitió todos los cargos de los que se le acusaba. El único pesar que tenía era haber sido detenido por un gentil erudito, porque nunca había podido encontrar un antagonista real, y no podía morir contento. Mi padre sonrió y dijo, “me llamaste erudito. ¿Piensas que podrías derrotarme con tus técnicas?” El ladrón respondió, “si me permiten pelear a mano limpia, puedo derrotarte en menos de un minuto.” Yip Man pidió a sus hombres desatar al ladrón, y le prometió que si lo vencía, estaría libre.
Los dos se encontraban listos para combatir en la oficina de detectives. El ladrón adoptó una postura ancha con brazos estirados, y atacó con golpes rápidos y poderosos. Mi padre esquivo a derecha e izquierda, tratando de mantenerse evasivo al comienzo y evitando hacer contacto con los golpes del ladrón, esperando su oportunidad. Súbitamente, cuando el ladrón había completado un golpe reverso pero no había retirado su brazo para otro ataque, mi padre avanzó, atrapando la muñeca con su mano derecha, presionando hacia abajo el codo con su mano izquierda y realizó un poderoso tirón hacia abajo. El ladrón perdió el balance y cayendo hacia adelante. En ese momento, Man levanto su pierna para ejecutar un golpe de rodilla ascendente al pecho del ladrón. El ladrón, habiendo recibido tan terrible ataque, cayó al suelo con saliva saliendo de su boca.
Desde ese incidente mi padre fue conocido como el erudito-detective, y Foshan fue una ciudad pacífica y libre de crimen durante los años en  que fue capitán del escuadrón de detectives allí.”

En 1937 los japoneses invaden el sur de China. Por 8 años  Yip Man (44 a 52 años) combatió a los japoneses pero Foshan fue ocupada y gobernada por un gobierno títere. El maestro juró que no sería usado por el gobierno títere por lo que se volvió muy pobre y a menudo pasó hambre. Por suerte su amigo, Chow Cheng Chung, le daba comida de vez en cuando. El maestro Yip quería devolver la amabilidad y tomó a su hijo, Chow Kwang Yiu, como estudiante. De 1941 a 1943  enseñó Ving Tsun en la fábrica de algodón en Wing On. En esta época estudiando con Chow Kwong Yiu estaban Kwok Fu, Chan Chi Sun, Ng Ying, Lun Kai, Chow Sa y otros. Esta fue la primera generación de estudiantes del Maestro Yip Man. Kwok Fu y Lun Kai mientras estuvieron vivos enseñaron Ving Tsun en China, en Kwong Chow, Foshan.

El grupo se reunía cada tarde y consistía de alrededor de ocho estudiantes y el Maestro enseñaba gratis; él pedía a sus estudiantes que lo llamaran ‘Man Sok’, Tio Man. Como esto ocurría durante la ocupación, las clases debían realizarse en secreto. Se ponía mucho énfasis en el estudio de Siu Nim Tao y la práctica de postura de jinete. Cuando practicaban Chi Sao, Man se cubría sus ojos hacia Chi Sao con sus alumnos, pudiendo diferenciar por la sensación con que estudiante estaba practicando. El método de enseñanza en esa época era enseñar el sistema completo en un año ya que tenían lecciones cada noche, que incluían Siu Nim Tao, Chum Kiu, Biu Tze, cuchillos mariposa, palo largo y muñeco de madera. No había ninguna otra enseñanza de otra forma de entrenamiento de manos pegajosas aparte del Chi Sao de dos manos.

...continúa en la 2° parte.

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